jueves, 30 de abril de 2009

El Cuento de María

El lunes fuimos a la entrega de premios que os dije en el que mi hija pequeña de 11 años recibió un premio por un cuento que había escrito. Cuando llegamos nos encontramos con unos premios que claramente no eran tan equitativos como parecían; ya sé que direis que es lógico cuando estoy hablando de mi hija y de un segundo premio en lugar del primero y todo lo demás; pero no, me refiero a que cuando se escribe un cuento, éste tiene que tener una moraleja o, en su defecto, algún tipo de mensaje que nos haga recapacitar sobre algún aspecto relacionado con nuestra existencia (básicamente para eso se inventaron y se leen a niños para encauzar su educación). El caso es que de solo dos premios que había el primero se lo dan a un alumno del mismo colegio(acapararon casi todas las categorias), lo lee y se va; sube mi hija y todos los que estábamos allí nos dimos cuenta de que tenía que haber un error ya que el texto era de mucha mayor calidad que el del primer premio. La verdad es que no me dolió, aunque hubo quien protestó. Para mí solo el ver que el esfuerzo de mi hija se recompensaba de alguna forma y la motivación que le quedó de que el año que viene volverá a concursar y que ganará es suficiente. La vida nos enseña de que no todo sale bien siempre aunque pongamos todo nuestro empeño, aunque eso no quita que comencemos otros proyectos con el mismo énfasis. A continuación, como os prometí, os dejo para que valoreis el trabajo de una niña que apunta maneras literarias; yo no puedo considerarme juez por la parte subjetiva de mi papel como padre, espero que comenteis lo que os parece su trabajo. El cuento se llama EL HADA CARIÑOSA.
Érase una vez un hada que era muy cariñosa y daba
Regalos a los niños pequeños que eran pobres y por eso la llamaban el Hada Cariñosa. Y un día se enteró que los animales del zoo les ocurría algo.

El Hada Cariñosa se va al zoo a visitar a todos los animales. Le han contado que hay un problema con las especies que lo habitan.

A los loros no les gustan los colores de sus plumas, al león no le gusta su rugido, al mono no le gusta subirse a los árboles, al tigre no le gusta sus manchas, a los flamencos sus largas patas y a los delfines no les gustan hacer un espectáculo en el agua.

En fin, todos están tristes por algo.

El Hada se pone manos a la obra y consulta a los animales de uno en uno que necesitan para ser felices.
Se dio cuenta que solo querían un poco de cariño y atención.
El hada con su varita mágica hace que todos los deseos de los animales se hagan realidad y por cada beso que le dieran a un animal era una entrada gratis para la noria y todos en el zoo fueron felices.

FIN

A los niños a veces también nos pasa como a los animales del zoo, pero nuestros papas son nuestra Hada Cariñosa y sus brazos son la varita que todo lo cura.

María

Valorad vosotros mismos. Esperaré desde Tauri vuestros comentarios que ella seguro que leera.¿Quien sabe si tardará mucho en aparecer por el mundo de los bloggers? No lo descarto. Saludos a todos...

domingo, 26 de abril de 2009

Cuentacuentos

Aunque hago la entrada hoy domingo (ya conoceis mis retrasos) corresponde al viernes 24, también con retraso por parte del colegio. Al grano. Contactaron conmigo del colegio de mis hijas (aunque la mayor vaya yá al instituto) para que, dado mi verso lingüista según la maestra, les contara un cuento a los niños del tercer ciclo de primaria. Debía de buscar uno con una moraleja que los niños entendieran, así que me puse manos a la obra a buscar por ahí más la moraleja que el cuento. No tardé en dar con el cuento del emperador y el mendigo. Es un cuento que si habeis leido el post de mi artículo en la revista que está unas entradas más abajo os dareis cuenta rápidamente de que sigue el hilo argumental de la educación en valores y en el respeto a lo que cada uno poseemos, y más en tiempos como los que nos está tocando vivir. A los niños les gustó bastante a juzgar más que nada porque no interrumpieron la lectura en ningún momento y se les veía cara de interés. Al final hice unas preguntas sencillas y parece que captaron la idea de la moraleja, lo que ya no sé es si pasado el tiempo sabrán recapacitar sobre lo que un padre de ellos les leyó un día soleado en el patio del colegio a la sombra de un árbol. A continuación os pongo el cuento para que vosotros también recapaciteis, creo que es interesante para todos:
"Un emperador estaba por salir de su palacio para dar un paseo matutino, cuando, a las puertas del mismo, se encuentra con un mendigo.
Suponiendo el pedido de una limosna, le preguntó: - ¿Qué quieres?
El mendigo lo miró y le dijo: - Me preguntas de una manera... como si tú pudieras satisfacer mi deseo.
El emperador le respondió: - Por supuesto que puedo satisfacer tu deseo... ¿Cuál es?
Y el mendigo le dijo: - Piensa dos veces antes de prometer.
El emperador, comenzando a molestarse, insistió: - Te daré cualquier cosa que pidas. Soy una persona muy poderosa, y extremadamente rica... ¿qué puedes tú desear que yo no pueda darte?
El mendigo le dijo: - Es un deseo muy simple... ¿ves esta bolsa que llevo conmigo?... ¿puedes llenarla con algo valioso?
- Por supuesto - dijo el emperador.
Llamó a uno de sus servidores y le dijo: - Llena de dinero la bolsa de este hombre.
El servidor lo hizo... y el dinero, apenas ingresado a la bolsa, desapareció.
Echó más y más, y el todo desaparecía al instante.
La bolsa del mendigo, por lo tanto, siempre estaba vacía.
El rumor de esta escena corrió rápidamente por toda la ciudad y entonces una gran multitud se reunió en el lugar, poniendo en juego el prestigio del emperador.
Entonces el emperador le dijo a sus servidores: - Estoy dispuesto a perder mi reino entero, pero este mendigo no se va a salir con la suya, ya que me dejará en ridículo frente al pueblo.
Diamantes, perlas, esmeraldas... uno a uno los tesoros del emperador iban ingresando en la bolsa, la cual no parecía tener fondo.
Todo lo que se colocaba en ella desaparecía inmediatamente.
Era el atardecer y habiendo quedado el emperador ya sin ninguna cosa que colocar en la bolsa del mendigo (habiendo llegado incluso a desprenderse de joyas que habían pertenecido a su familia por siglos), se tiró a los pies del mendigo y, admitiendo su derrota, le dijo: - Has ganado tú, pero antes que te vayas, satisface mi curiosidad: ¿cuál es el secreto de tu bolsa?
El mendigo le dijo: - ¿El secreto?... está simplemente hecha de deseos humanos.
Anónimo
Moraleja:
Piensa en los deseos ¿cuál es su mecanismo?:
Primero hay una gran excitación: la aventura. Se siente un gran impulso.
Algo va a suceder, se está al borde de algo. Y luego que se tiene el coche, el velero, la casa... de repente, nada de ello tiene significado ya.
¿Que pasó? La mente lo ha desmaterializado.
El coche está en el garaje, pero ya no excita de la misma manera. Lo que excitaba era conseguirlo... o lo que es lo mismo, emborracharse con el deseo hasta olvidarse que el vacío se sitúa en el interior de uno mismo.
Pero ahora, con el deseo cumplido: el coche en el garaje, el dinero en el banco... desaparece la excitación.
De nuevo se siente ese vacío. Y se tiene que crear un nuevo deseo para escapar de esa sensación, esa ansiedad, ese vacío.
Así es como va la mayoría de la gente por la vida: de un deseo en otro, convertida en mendigos con bolsas que jamás parecen poderse llenar. Cuando se lo alcanza, un nuevo deseo se hace necesario, olvidando ese que tanto se buscó."
Mañana os haré otra entrada que me llenará de orgullo personal ya que mi hija pequeña parece que apunta maneras literarias y ha ganado un premio de cuentos. La entrega de galardones será mañana por la mañana, así que ya os contaré y documentaré con la publicación del cuento. Y por hoy...colorin colorado...hasta aquí hemos contado desde Tauri. Saludos y aprovechad la dicha que la vida os dá, que no es poca...

sábado, 18 de abril de 2009

CAMBIOS (14/04/09)

Como ya dejé reflejado en mi anterior entrada, estoy en el hospital otra vez. Pero ésta vez hay cambios sustanciales; ayer nos mudaron al hospital en que le insertarán el DAI al familiar en cuestión. Por cierto, ya sé lo que es un DAI, es un desfibrilador interno que detecta el fallo del corazón y actúa como una puesta en marcha soltando una descarga eléctrica que hace que comience a latir otra vez con la intensidad suficiente; en otras palabras, el aparato en cuestión es una versión diminuta del equipo que todos hemos visto alguna vez actuar en películas o en la realidad cuando hay una parada cardiaca. Y para la pequeñez que tiene (igual que un marcapasos) ya vale el jodido una pasta. Todo sea por conseguir la calidad de vida necesaria para una persona que, teóricamente, es joven y todavía puede dar mucha guerra.
Viendo el gasto que está haciendo la Seguridad Social es lógico decir que hoy por hoy en España (con sus más y sus menos) ésta institución funciona bastante bien. Y lógicamente se nos viene a la mente en momentos como éste el hecho de que los gobiernos deberían invertir muchísimo más de lo que hacen en la sanidad pública y no en maquiavélicas armas de destrucción y en burbujas dinerarias que solo buscan el caos y la desolación en un mundo infestado de virus y enfermedades que día a día se llevan la vida de miles de personas. Puede parecer una vanalidad recurrente el decir esto ahora que mi familiar está ingresado, pero no lo es porque mi familiar está recibiendo el tratamiento adecuado a su afectación; el problema lo tienen todos los demás enfermos que no reciben la asistencia médica necesaria ni a tiempo porque no es rentable invertir en salud. Quizás en estos momentos de crisis mundial y faltos de dinero los gobiernos tengan la lucidez necesaria para darse cuenta de que, cuando haya dinero fluyendo otra vez, deban de acercar más dinero a la salud de todos y no a especulaciones baratas que luego salen tan caras como estamos sufriendo en nuestras carnes a día de hoy. Hago ésta reflexión desde la habitación del nuevo hospital que visitamos (por cierto sin wifi tampoco) y dándome cuenta de que nos dicen que nuestra esperanza de vida ha subido bastante alto.¿alto? Nos hablan de superar la barrera de los ochenta con creces y yo miro a mi alrededor y a todos mis familiares muertos hasta ahora para comprobar que solo tengo dos o tres conocidos o familiares que pasen la barrera de los ochenta; eso sí, el que lo consigue se pasa bastante, pero ninguno de los demás han pasado de los 76 incluido mi padre; joder, eso da que pensar bastante con la edad que tengo y que es más de la mitad del camino supuesto a recorrer. Así que ahí dejo puesta mi pica en Flandes y me despido desde Tauri donde seguiré dándole vueltas a tan peliagudo asunto por lo menos para mí en estos momentos de bajada moral.

domingo, 12 de abril de 2009

IMPOTENCIA

Eso es lo que siento, impotencia. Despues de todo lo andado, volvemos al principio: no tengo tiempo para nada. Todos los proyectos parados, entre ellos éste del blog, y vuelta también al hospital. Bueno, lo tomaremos con la consiguiente relajación neuronal que cada vez cuesta más. Espero estar muy pronto por aquí; pero no podía irme sin despedirme y deciros un hasta pronto. Desde Tauri un saludo y que lo paseis bien por allí donde os encontreis.

jueves, 2 de abril de 2009

Problemas con los comentarios

Llevo desde el principio del blog preguntándome por qué nadie comentaba nada de mis entradas sabiendo que había gente que las leía y deberían hacerlo. Hoy, a través del blog de mi buen amigo plastic he constatado en un comentario una advertencia de que habían intentado publicar en mi blog y no habían podido comentar nada. Llevo un buen rato en ello y creo que a partir de ahora ya sí que se puede comentar mis entradas. Os insto a todos mis lectores y seguidores a que hagais todos los comentarios que tengais que hacer de todas las entradas nuevas y viejas; con eso me daríais una gran alegría. No os podeis imaginar lo frustrante que és que tú veas que te leen y que se hacen seguidores tuyos, pero no ves que nadie comente nada. Es como si emitieras un programa de televisión y todos los espectadores miraran hacia otro lado, el programa será bueno o malo, pero nunca se sabrá. Bueno, espero que hagais el trabajo atrasado y que a partir de ahora podais compartir conmigo estos momentos de lucidez literaria. Todos los días se aprende algo. Saludos desde Tauri, y me voy a tomar un buen café que hoy me lo merezco...

miércoles, 1 de abril de 2009

Reflexiones de un Padre

Hace unos años publiqué un artículo en la revista del colegio de mis hijas en referencia a la ineptitud de la mayoría de los jóvenes de hoy en día. Y ahora, al hilo de la actualidad con tanto Bolonia de por medio creo que sería bueno reproducirlo aquí y comenteis sobre él si llevo razón o nó en lo que decía hace cuatro años. El título del artículo era el mismo que le he puesto al post

"Hace años que no escribo nada; y ahora, a la hora de redactar éste artículo, no encontraba un tema que me resultara idoneo para una revista colegial(¡con la de revistas en las que he escrito!). Pero,como siempre ocurre, al final surge la chispa.

Iba a acostarme y echar mi rato de lectura(ejercicio sano para cuerpo y mente) cuando, al acercarme al dormitorio de mis hijas para hacerlas dormir, mi hija mayor me dice: “papa, es que tengo cuatro días para leerme este libro”. Me quedé horrorizado. Creía que leía por voluntad propia como yo esperaba haberle inculcado.¡Qué equivocado estaba! En ese momento pensé:¿Hacia dónde va una generación que solo lee por obligación?¿Cómo se enfrentarán a una vida en la que quien no sabe nada no es nadie? La respuesta era obvia: Hacia el nuevo analfabetismo lingüistico y cultural.

Hace unos años quien no sabia leer era analfabeto; hoy en día, hay ejercitos de analfabetos que saben leer,¿Qué cómo es eso? Muy sencillo, ahora todo el mundo sabe leer; pero con leer no basta.¿De qué sirve saber leer la palabra anquilosado si no se sabe su significado? La sociedad actual cada vez nos pide más conocimientos y las nuevas generaciones utilizan ordenadores, internet, dvd, playstation... Pero todo esto es insuficiente si detrás no estan unos conocimientos básicos que son la lectura y la práctica de la imaginación. Venimos de una generación que rompió reglas; nos hicimos a nosotros mismos; juramos que aprenderiamos de los errores de nuestros padres y que nuestros hijos tendrían nuestro apoyo en todo; ya no seriamos simplemente padres, sino colegas de nuestros hijos.¿Y en qué nos hemos convertido? Hemos pasado de esclavos de nuestros padres a esclavos de nuestros hijos. Si antes haciamos lo que los padres decían sin rechistar; ahora hacemos lo que nos dicen los hijos, discutiendolo, pero, al final, hacen de nosotros lo que quieren y tienen de todo.¿De todo? No. Les falta lo más importante, el aliciente, la chispa. Antes se jugaba en la calle, vale que no había otra cosa; hoy juegan en casa con la play o el ordenador, pero nadie les dice que la calle sigue ahí. Y si alguien se lo dice es porque en la puerta está la moto de turno dispuesta a correr como loca por las calles.¿Y el encanto del paseo? Simplemente ya no existe.

Y os preguntareis que todo esto a dónde nos lleva. Pues a una reflexión que creo que deberiamos de hacernos todos los padres con un claro fin: nuestra segunda revolución. Si antes hicimos una revolución con nuestros padres y cambiamos normas y pautas de conducta; ahora es el momento de hacer lo mismo, pero con nuestros hijos. La tarea no es sencilla, pero creo que no imposible; solo es cuestión de plantearselo claramente y ponernos manos a la obra, sin miedo alguno. Si os sirve de algo este artículo, creo que una buena forma de comenzar la tarea es inculcando a nuestros hijos el sano hábito de la lectura (no olvidemos que los niños absorben la información mucho más rápido que los mayores). De éste modo puede que consigamos algo positivo: despertar la imaginación y hacer que busquen y descubran los valores perdidos. Algo que, con el tiempo, descubrirían que tiene más valor que una vida llena de valores materiales que, al fin y al cabo, no conducen a nada. Bueno, sí, a la frustración de una vida vacia y sin sentido.

Solo espero que estas lineas sirvan a alguien para reflexionar un poco y tomar la iniciativa. Demostremos a nuestros hijos el por qué fuimos la generación del cambio (no político) de la España que nos ha tocado vivir. Sinceramente, somos capaces.

Por cierto; anquilosado significa: “persona o institución que no adelanta en sus actos o acciones buscando una mejora en sus actividades que puede venir dado en algunos casos por dejadez o falta de estimulos”".

Saludos desde Tauri y espero vuestros comentarios. Buenas noches y buena suerte.